Comunicado Docentes Liceo Enrique Molina Garmendia

16 junio 2015

Concepción, 16 de junio de 2015

A la comunidad liceana:

El día 20 de abril del presente año la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, ha firmado un Proyecto de Ley conocido como “Carrera Docente”. Dado el tremendo impacto que tendrá en nuestro ejercicio profesional, los profesores del Liceo  “Enrique Molina Garmendia” de la comuna de Concepción, hemos analizado y evaluado este documento.

En la prensa se han publicado algunos titulares que anuncian que esta futura ley subiría nuestros salarios, valorando el mérito personal y dignificando al fin el ejercicio docente. Sin embargo, fue imposible encontrarlo de esta manera en las páginas del proyecto.

Tras la consulta nacional del 11 de mayo, y con un 97%, hemos rechazado el Proyecto de Ley dando una clarísima señal que esta iniciativa legal nos parece un perjuicio. En una Asamblea de Profesores del Liceo Enrique Molina Garmendia, realizada el día miércoles 27 de mayo, se decidió adherir al paro indefinido convocado por el Colegio de Profesores a partir del día lunes 01 de junio con el objetivo de exigir el retiro del proyecto de ley del Congreso.

Nos oponemos a esta iniciativa del Ejecutivo por las siguientes razones:

  1. No se establece la responsabilidad de las universidades en la formación y desempeño de los egresados de pedagogía.
  2. Los profesores del Liceo “Enrique Molina Garmendia” no están en contra de evaluarse, de hecho todos han sido sometidos a evaluación desde hace diez años; la gran mayoría de ellos, incluso, han realizado evaluaciones voluntarias como la AVDI o la AEP, cuya preparación requiere de un tiempo adicional que va en directo deterioro de nuestra vida personal y familiar. La “tasación” que propone el proyecto sólo apela al individualismo y no al trabajo cooperativo entre docentes, el cual permite generar instancias de aprendizaje enriquecedoras para los estudiantes.
  3. Nos sorprende negativamente que la supuesta Carrera Docente no considere para el “ascenso” responsabilidades profesionales que son medulares en la vida escolar, las más de las veces sin correlato alguno en el salario, a saber:
    • Jefatura de curso.
    • Confección de material didáctico e instrumentos de evaluación.
    • Asesorías de Centros de Estudiantes y de Centros de Padres.
    • Representación de profesores en los Equipos de Gestión o el Consejo Escolar.
    • Guía de profesores practicantes.
    • Actividades artísticas, deportivas y/o culturales de extensión, investigación y de convivencia interna.

    Esta ausencia no podemos interpretarla, sino como un profundo desconocimiento de las dinámicas propias de la vida escolar actual.

  4. Promueve la desprofesionalización del docente, porque está en permanente cuestionamiento su idoneidad profesional, arriesgando continuamente su desvinculación.
  5. Establece un estatuto punitivo, que castiga en vez de mejorar las falencias, que ninguna otra carrera profesional tiene.
  6. Deja pendiente un tema importante: el agobio laboral docente. El porcentaje 75 horas lectivas /35 horas no lectivas es insuficiente para preparar mejores clases: trabajo administrativo, búsqueda de material pertinente y adecuado a la asignatura, planificación de la clase, construcción de material pedagógico y didáctico, construcción de instrumentos de evaluación que atiendan a las diversos estilos de aprendizaje, revisión de los mismos, análisis de los resultados para tomar decisiones pedagógicas y remediales, atención de apoderados y estudiantes. Además, en el Proyecto no se especifica a qué estarán destinadas las horas no lectivas. Tampoco se hace cargo de una antigua demanda que el profesor ha denunciado: La cantidad de alumnos por sala. Estos dos factores son cruciales en el proceso final de aprendizaje de los estudiantes, proceso que no se mejora solamente con la certificación constante del profesional. Nos es difícil vislumbrar cuál es el concepto de Calidad en este proyecto de “Nueva Carrera Profesional” manteniendo estas condiciones.
  7. Desincentiva la incorporación de los mejores estudiantes a estudiar pedagogía.
  8. No mejora las condiciones laborales del profesor, porque:
    • A pesar de los muchos diagnósticos en los que se critica que nuestro salario está construido por muchas “asignaciones”, el corazón del proyecto se basa en una nueva llamada “Asignación por Tramo de Desarrollo Profesional”. Esta asignación está expresada en montos máximos (44 horas de contrato y 15 bienios) lo que hace matemáticamente imposible de calcular en forma exacta a la hora de realizar simulaciones de salario. Nos ofende que con pompa se difundan estos montos, generando en la opinión pública la ilusión que efectivamente estos serán los valores reales.
    • El bono de reconocimiento profesional es la única asignación que se incrementa, mientras que la asignación por experiencia (bienios) baja un 50%, otras varias – como la de perfeccionamiento – se eliminan. Aunque se ha expresado que no bajarán los sueldos actuales, esto no significa que se reajustarán en la medida actual.
    • La hora cronológica real base de trabajo de un profesor, sigue costando en Chile la suma inaceptable de $3,233 para la educación media y $3.073 para la educación básica. Aún con las múltiples declaraciones de buenas intenciones, nuestro sueldo base permanece intacto.
    • El publicitado aumento de sueldo sólo sería efectivo después del décimo año de trabajo y en base al rendimiento en pruebas de conocimiento y portafolios enriquecidos.
    • No se pronuncia respecto a la salida de la carrera. Por lo tanto, ¿tendremos los profesores que movilizarnos todos los años para conseguir un bono de retiro que supla el tremendo daño previsional?

En definitiva, este Proyecto de Carrera Docente no se enfoca en mejorar la calidad de la educación. Ante este escenario, exigimos que el Proyecto de Carrera Docente sea retirado y reformulado de tal forma que incorpore las propuestas de los docentes, recogidas a nivel nacional durante el proceso de consulta realizado a fines del año 2014. Esta Carrera Docente va claramente en desmedro del mejoramiento de la calidad de la educación y, por lo tanto, perjudica a los estudiantes de todo el país.

Sabemos que en este proceso de movilización contamos con el apoyo de gran parte de nuestros estudiantes, quienes, nos han manifestado su comprensión y adhesión a nuestras demandas.

Teniendo muy presente el impacto en la cobertura curricular y el ritmo de trabajo que esta movilización produce, invitamos a toda la comunidad a informarse y apoyar la posición de sus profesores, en la convicción que mejorar las condiciones laborales del maestro es potenciar la educación de los jóvenes de Chile.

Cordialmente

Docentes del Liceo Enrique Molina Garmendia.

Documento oficial: CARTA PARO I