La última reunión de apoderados tuvo la sorpresa de abrirse con la exposición «Recovecos Estudiantiles», realizada por el Taller de Fotografía Somos Liceo, en donde participan tanto estudiantes como profesores de manera horizontal y colaborativa.
La exposición, que se montó en el hall del Liceo, fue ejecutada con elementos de deshecho, en donde se adhirieron dieciséis fotografías a cajas de cartón en desuso. La intención era presentar las imágenes de manera tridimensional, teniendo como objetivo mostrar lugares del Liceo que conviven con nosotros, pero que por lo general no vemos. De esta manera, comenta Máximo Sandoval, profesor colaborador del taller, «la exposición se posiciona como una denuncia práctica-artística hacia los lugares abandonados durante años por las autoridades». En cuanto a los resultados, Máximo evalúa la actividad de manera positiva: «la gente se detuvo a observar y conversó sobre ello. Eso está bien, porque como taller es nuestro objetivo».
El taller se proyecta con nuevas exposiciones, probablemente utilizando el patio del Liceo y los tiempos de recreo, para poder compartir nuevas instancias con los estudiantes, demostrando las problemáticas tanto a nivel interno como externo, generando así la esperada discusión crítica.